Capítulo 10: El manual gráfico
El presente capítulo trata sobre el diseño gráfico aplicado al mundo editorial: sus características y tareas del diseñador o diagramador. La regulación de los elementos gráficos y visuales suele establecerse en el manual gráfico (o manual de identidad gráfica), instrumento de consulta obligada por cualquier diseñador que trabaje para una empresa editorial.
1. Diseño gráfico editorial
Según explica Verde Arocha (2013, p. 120), es la rama del diseño gráfico que proyecta, programa, prepara, orienta y efectúa una propuesta estética de un impreso. Realiza la maqueta y la composición según el tipo de publicación: portadas, diagramación y maquetación de libros, revistas, periódicos, folletos, flyer, catálogos, encartados, gacetas, informes anuales y programas culturales. Exige una estructura con unas características que le son propias en cuanto a formato, composición y contenido visual.
La clave del diseño gráfico no solo radica en la estética visual de la obra, sino también en la funcionalidad. Esto significa que el diseño debe ayudar a la legibilidad de los contenidos y a la jerarquización de la información. El siguiente video de Valeria Cinta (2014b) ofrece siete tips para desarrollar una comunicación gráfica eficaz y creativa:
1.1. ¿Cuáles son las tareas del diseñador gráfico?
Verde Arocha (2013, p.121) enumera las tareas que le competen al diseñador gráfico:
- Define el objetivo comunicacional, conceptual y de contenido considerando su impacto e innovación visual en cuanto a formato, imágenes y color.
- Elabora la portada del libro.
- Delinea, modifica, interviene y da tratamiento visual a las imágenes, a los gráficos y a las ilustraciones del libro.
- Establece las pautas de la diagramación.
- Propone el color corporativo o los colores para el texto.
- Realiza la preimpresión de la maqueta.
- Ofrece múltiples opciones bajo una norma establecida.
Estas directrices puede establecerlas el diseñador gráfico, pero también pueden estar fijadas previamente por la editorial o por el medio de comunicación a través del manual gráfico.
2. Partes de un manual gráfico
Orozco (2003), en su libro Edición de diarios. Una estrategia para el diseño de periódicos, menciona cuáles son los elementos fundamentales que deben ser considerados en el diseño de un producto editorial: logotipo, formato/tamaño, manchas/márgenes, retícula, tipografía, diagramación y color. Tales elementos suelen estar presentes en el manual gráfico. La importancia de este instrumento radica en que permite unificar elementos y definir claramente la visualización de los contenidos.
2.1. Logotipo
El término logotipo suele tomarse en su acepción general, pero según sus características puede tener otras denomanaciones, tal como se observa en la siguiente figura, tomada de Mercadeo y Publicidad:
En el mundo del libro, los logotipos suelen ser el del sello editorial, mientras que en los periódicos y revistas la cabecera hace las veces del logotipo. Para Orozco (2003, p. 63) el logo «debe sintetizar gráficamente el espíritu del proyecto y expresar el estilo de los tiempos».
En los manuales gráficos se especifican sus dimensiones, ubicación en la publicación, tipografía, colores y versiones. Un ejemplo lo podemos encontrar en el siguiente manual de identidad corporativa:
2.2. Formato / tamaño
Tamaños del papel para imprenta según las normas ISO 216. Figura tomada de Píxel Creativo
Suelen usarse tres en el mundo de la prensa: estándar o sábana (1/2 pliego), propio de los grandes diarios; tabloide (1/4 de pliego), más popular en los periódicos por su versatilidad en su uso y porque permite reducir costos de papel, y 1/8 de pliego, muy común en las revistas. También se emplean formatos con otra escala según las normas ISO 216 (ver imagen). Para mayores detalles sobre dimensiones y formatos, recomendamos visitar la página Tamaños de Papel.
2.3. Manchas / márgenes
La mancha es el área que recibirá tinta en una publicación. Al definir la mancha se definen los márgenes. Las dimensiones de los márgenes pueden variar según los requerimientos de la publicación, la cantidad de texto que se requiere incorporar, entre otras viariables.
2.4. Retícula
La retícula es el conjunto de columnas o módulos que posee la mancha. Una vez dividida la mancha en un conjunto de columnas, estas se mantienen como retícula básica de todas las páginas. El propósito de esto es organizar los contenidos tanto textuales como gráficos de una forma armoniosa y ordenada:
De esta manera, existirá un columnaje para el espacio publicitario, un columnaje para la información general, otro para tapas de cuerpo y reportajes especiales, y otro para el espacio de opinión y editorial, sin descartar la existencia de material en medida «falsa». (Orozco, 2003, p. 67)
Orozco (2003) añade que en los periódicos de formato sábana la mancha está dividida en 8 columnas y en el formato tabloide en 6. Estas cantidades pueden variar según el medio y sus dimensiones.
Ejemplo de uso de retícula en un periódico. Se puede observar la diagramación a cinco columnas.
Las páginas de internet también poseen sistemas modulares para distribuir en el espacio los contenidos. La Fundéu BBVA (2012) presenta algunos ejemplos de retículas para internet.
2.5. Tipografía
La tipografía es la parte de la edición que trata sobre las letras de imprenta, su diseño y composición. Según Orozco (2003, pp. 73-74):
El factor de legibilidad por excelencia de un periódico [y de cualquier tipo de publicación] está constituido por su tipografía [...]. La selección de la familia básica, variantes y cuerpos de cada elemento de la unidad informativa, constituye una decisión determinante para construir un modelo tipográfico que, junto a la selección de rayas y blancos, contribuyen a definir la personalidad gráfica de un diario.
Gutiérrez Martín (2003, p. 103) explica que incluso el diseño de la tipografía influye en el mensaje mismo, en especial en publicaciones digitales:
La forma de la grafía contribuye al contenido. Su aspecto, su tamaño, tipo de letra, color, el lugar donde se sitúa y cómo aparece en pantalla, etcétera, contribuyen a su significado. En este sentido, es fundamental elegir con buen criterio el aspecto de los textos que van a aparecer en pantalla, huir de tipos de letra poco legibles y tratar de elegir una fuente cuyo aspecto esté en la línea de la temática que se expone y de nuestros objetivos comunicativos y educativos.
Existen muchos tipos de letras, pero pueden clasificarse en dos grandes grupos: serif y sans serif. Las primeras son aquellas que presentan remates, como la Times New Roman, Garamond o Georgia, mientras que las segundas (también conocidas como palo seco) son aquellas que carecen de remates, como Arial, Helvética, Verdana o Tahoma.
El diseño de las letras puede tener variaciones, y el conjunto de variaciones de una misma letra se conoce como familia tipográfica. Comúnmente se emplean tres variantes: redonda (regular), cursivas (italics) y negritas (bold). El propósito de usar variantes de una misma letra es facilitar al lector la ubicación de información clave y jerarquizada, además de facilitar la lectura en general. Una buena guía sobre su uso en la redacción de textos generales es la que ofrece la Fundéu BBVA titulada Cursiva y redonda. Guía de estilo.
La selección de la familia tipográfica para publicaciones digitales tiene ciertas limitaciones. Así lo explica Jorge de Buen:
Una fuente tipográfica digital suele ser hoy un paquete discreto entre cantidades inmensas de datos. Esto no era así en los noventa, cuando cada tipo representaba una voluminosa embestida de bytes. Es fácil imaginar la enorme carga informática de una página que combinara letras distintas. La solución que se ideó para la web fue distribuir gratuitamente un conjunto estándar de tipos de muy buena calidad, con la intención de que la mayoría de los usuarios los tuviera en sus ordenadores. Nuestros ordenadores seguramente cuentan con algunos de ellos o todos: Verdana, Trebuchet, Arial, Times New Roman, Courier New y Georgia, entre otros. Con este método, en vez de transmitir una fuente tipográfica completa, el servidor web entrega tan solo el nombre de la fuente. Si esa letra está instalada en el equipo, se podrá ver la página tal como la concibió el diseñador; si no, verá una letra alternativa que el navegador elegirá según ciertos criterios. (Fundéu BBVA, 2012, p. 291)
Por estas razones, Fundéu BBVA (2012, p. 303) recomienda utilizar «tipografías universales para que sean reconocidas desde cualquier dispositivo y, si es necesario usar una fuente no estándar, el texto debe convertirse en una imagen, de esta forma todo el mundo podrá ver la tipografía aunque no tenga instalada la fuente en su equipo».
2.6. Diagramación
Según Martínez de Sousa (2004, p. 276), la diagramación es «el arte de distribuir estética y y equilibradamente la composición y y la ilustración de una página». Los elementos antes descritos (reticulado, tipografía, ilustraciones, espacios publicitarios) darán las pautas para presentar los contenidos de forma jerárquica, uniforme y armoniosa.
La diagramación de diarios suele ser de las más complejas por la cantidad de elementos gráficos. Orozco (2003) menciona que en un principio se utilizaba un diseño escalonado, es decir, los textos estaban diagramados de tal forma que formaban una figura de seis lados. En la actualidad, se emplea el diseño retangular, cuyos textos se diagraman en figuras de cuatro lados. Esta maquetación, sobre todo basada en módulos, permite repartir de forma mucho más eficiente los espacios de la mancha.
En el caso de la maquetación en publicaciones web, Blas Hernández (Fundéu, 2012) explica que se manejan tres estándares que garanticen mostrar la información de forma universal sin importar el tipo de dispositivo utilizado:
- HTML/XHTML: para generar el código del contenido.
- CSS: para definir la presentación gráfica de la maquetación.
- JS (JavaScript): para mejorar la interacción de sus elementos.
2.7. Color
Uno de los elementos clave en el diseño editorial es el color, pues además de tornar mucho más atractiva la publicación este refleja simbolismo asociado a determinados valores y percepciones. La escogencia del color no debe ser, por tanto, ni caprichosa ni mucho menos desordenada.
Un elemento orientador a la hora de seleccionar una paleta de colores acorde con la publicación es la psicología del color, que consiste en que hay colores que evocan determinadas emociones o sensaciones: pasión, elegancia, esperanza, luz, calor, entre otros. En los logotipos estos valores son considerados al momento de escoger el color más adecuado. Esto se puede apreciar en la siguiente infografía tomada de websa100:
Desde un punto de vista técnico, el color se logra de dos maneras: por el formato CMYK (cian, magenta, amarillo y negro) para publicaciones impresas y RGB (rojo, verde y azul) para publicaciones digitales. La combinación de cada uno de esos colores genera el resto de los colores y tonalidades. De ahí que tengamos en imprenta términos como estos:
- Monocromía: una tinta (negra)
- Bicromía: dos tintas.
- Tricomía: tres tintas.
- Cuatricomía: cuatro tintas (CMYK).
- Bitono: dos tonos de una misma tinta.
- Diapositiva: impresión en negativo.
- Duotonos: reproducción de una imagen a dos tintas.
- Sobreimpresión: impresión de un elemento sobre otro.
Las tonalidades están codificadas con exactitud gracias a la guía Pantone. Estos códigos están incorporados en los programas de diseño gráfico, así como también en plantillas prediseñadas para blogs y páginas afines.
A manera de resumen, recomendamos ver el siguiente video de YouTube sobre el diseño editorial.
Referencias bibliográficas del capítulo 10
Calp, R. (2017). Manual corporativo Raúl Calp [presentación en línea]. Disponible: https://es.slideshare.net/raulcalp/manual-corporativo-raulcalp
Cinta, V. (2014a). Diseño editorial CÁPSULA [video en YouTube]. Disponible: https://www.youtube.com/watch?v=FjAi8vQMMHU
Cinta, V. (2014b). Diseño editorial TIPS [video en YouTube]. Disponible: https://www.youtube.com/watch?v=0ulMD2qSjek
Fundéu BBVA (2012). Escribir en internet. Guía para los nuevos medios y las redes sociales. Barcelona: La Galaxia Gutenberg.
Gutiérrez Martín, A. (2003). Alfabetización digital. Algo más que ratones y teclas. Barcelona: Gedisa.
Martínez de Sousa, J. (2004). Diccionario de bibliología y ciencias afines (3ª ed.). Gijón: Trea.
Mercadeo y Publicidad (2007). [Página web en línea]. Disponible: http://mercadeoypublicidad.com
Orozco, E. (2003). Edición de diarios. Una estrategia para el diseño de periódicos. Caracas: EnGrupo.
Verde Arocha, C. (2013). Cómo editar y publicar un libro. El dilema del autor. Caracas: Eclepsidra.